martes, febrero 27, 2007

Hoy me miré en el espejo...


...y no me gustó lo que vi. No sólo por las lágrimas que surcaban mi rostro, sino porque no fui capaz de reconocerme. Día tras día he estado viendo la misma cara frente a mí al despertar, y hoy de pronto algo cambió. No sé el qué, pero algo en mi interior se rompió al verme, al observar cómo cambia mi rostro y se desfigura por el dolor incontenible que siente mi alma.

Dolor por el amor, por el odio, porque sí... Dolor por estar triste, dolor por mi alegría: simplemente, dolor... por todo y por nada; por llamar la atención y por querer pasar desapercibida; por los latidos de mi corazón y el silencio que oigo al dejar de respirar; por el llanto que no consigo sacar y por el que sale solo; por ti y por mí... por nosotros y por nosotros... y por no saber qué me pasa.

¿Es peor sentir ese dolor o no saber qué hacer para paliarlo...? Simplemente... estoy triste.