Robado de El Chico Gris:
Coge el mes en que naciste
Enero: Bailé con
Febrero: Amé a
Marzo: Me acosté
Abril: Jugué con
Mayo: Le arreé una patada a
Junio: Quise casarme con
Julio: Le canté el Aserejé a
Agosto: Tuve una cena romántica con
Septiembre: Me lanzé salvajemente sobre
Octubre: Insulté a
Noviembre: Le grité a
Diciembre: Me alejé corriendo de
Ahora coge el día que naciste
1 : Un clip
2 : Un monstruo
3 : Un teléfono
4 : Un tenedor
5 : Un mafioso
6 : Un japonés
7 : Un caballo
8 : Tu padre
9 : El novio de mi mejor amiga
10: Una ardilla
11: Un mP3
12: Un pepino
13: Jose María Aznar
14: Un animal de peluche
15: Una gaviota
16: Una lechuga
17: Tu madre
18: Una web cam
19: Tu colonia preferida
20: Un jugador de futbol
21: Tu pareja
22: Un bombero
23: Un bebe
24: Mi vecino
25: Un bate de beisbol
26: Un cubo de basura
27: Un DVD
28: Mi profesor más odiado
29: Un rotulador permanente
30: Un libro de Harry Potter
31: Un árbol en un parque lleno de niños
Y por último el color de la camiseta que llevas ahora mismo
Blanco: Porque tengo cierto retraso mental
Negro: Porque le quiero
Rosa: Porque NO soy gay/lesbiana
Rojo: Porque unas voces me dijeron que lo hiciese
Azul: Porque soy sexy sexy sexy, y hago lo que me da la gana
Verde: Porque me odio a mi mism@
Violeta: Porque tu olor corporal me obligó
Gris: Porque soy gay/lesbiana
Amarillo: Porque alguien me dijo que lo hiciese a cambio de sexo
Naranja: Porque el cielo es azul
Otros: Porque así soy yo
La mía es:
Amé a un bebé porque me odio a mí misma.
¿Cual es la vuestra?
domingo, junio 18, 2006
Chorrada
Maulló
La Chica Gato
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0:22
5
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martes, mayo 09, 2006
Desnudo
Y, mientras, seguiré buscando a mi patito...
Te quiero...
Maulló
La Chica Gato
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8:04
2
maullidos
viernes, abril 28, 2006
Mi abuelo
Hace tan sólo un par de meses se murió la abuela de una amiga mía, una amiga que no dudó en venir a mí cada vez que necesitaba consuelo durante el corto tiempo que aquella mujer sobrevivió al cáncer.
Hoy es mi abuelo el que se muere, y yo no puedo acudir a ella porque ya he llorado bastante y ella y yo sabemos que "no es buena animando" ;) (ya sabes que lo digo con cariño, tontita, no te me ofendas".
Ayer me pasé toda la mañana pensando en qué escribir ahora. Tenía un texto en mente precioso, o eso me parecía a mí, pero esta noche lo olvidé entero, y no me quedan más palabras que varios "No, por favor..."
Ni siquiera sé cómo está ahora. Este miércoles le dieron, por fin, morfina y aquella noche empeoró mucho. Hoy es viernes y mis padres fueron a Oviedo, donde está ingresado, ayer. Mi hermano y yo vamos hoy en autobús.
Nunca estuve muy apegada a él, todo hay que decirlo, pero, aún así, era (mejor dicho, es, mi abuelo. Y no me vale que me digan que "va a estar en otro sitio mucho mejor", porque yo no soy creyente. ¿Dónde va a estar mejor que en su casa, con su hija que tan mal lo está pasando ahora? ¿Cómo podría creer si veo todo el sufrimiento que hay a mi alrededor?
No puedo seguir escribiendo. Sólo tres palabras: NO, POR FAVOR.............
Maulló
La Chica Gato
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9:01
2
maullidos
martes, abril 25, 2006
Me basta así, Ángel González
Si yo fuese Dios
y tuviese el secreto,
haría
un ser exacto a ti;
lo probaría
(a la manera de los panaderos
cuando prueban el pan, es decir:
con la boca),
y si ese sabor fuese
igual al tuyo, o sea
tu mismo olor, y tu manera
de sonreír,
y de guardar silencio,
y de estrechar mi mano estrictamente,
y de besarnos sin hacernos daño
-de esto sí estoy seguro: pongo
tanta atención cuando te beso-;
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaentonces,
si yo fuese Dios,
podría repetirte y repetirte,
siempre la misma y siempre diferente,
sin cansarme jamás del juego idéntico,
sin desdeñar tampoco la que fuiste
por la que ibas a ser dentro de nada;
ya no sé si me explico, pero quiero
aclarar si yo fuese
Dios, haría
lo posible por ser Ángel González
para quererte tal como te quiero,
para aguardar con calma
a que te crees tú misma cada día,
a que sorprendas todas las mañanas
la luz recién nacida con tu propia
luz, y corras
la cortina impalpable que separa
el sueño de la vida,
resucitándome con tu palabra,
Lázaro alegre,
yo, mojado todavía
de sombras y pereza,
sorprendido y absorto
en la contemplación de todo aquello
que, en unión de mí mismo,
recuperas y salvas, mueves, dejas
abandonado cuando -luego- callas...
(Escucho tu silencio.
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaOigo
constelaciones: existes.
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaCreo en ti.
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaEres.
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaMe basta.)
Maulló
La Chica Gato
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7:16
0
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Queda prohibido, de Alfredo Cuervo Barrero
Aquí tenéis un bonito poema, atribuido a Pablo Neruda, pero surgido de la pluma de Alfredo Cuervo Barrero. Luego copio otro.
Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarte un DÍA sin saber que hacer,
tener miedo a tus recuerdos.
Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quieres,
abandonarlo todo por miedo,
no convertir en realidad tus sueños.
Queda prohibido no demostrar tu amor,
hacer que alguien pague tus deudas y mal humor.
Queda prohibido dejar a tus amigos,
no intentar comprender lo que vivieron juntos,
llamarles solo cuando los necesitas.
Queda prohibido no ser tú ante la gente,
fingir ante las personas que no te importan,
hacerte el gracioso con tal de que te recuerden,
olvidar a toda la gente que te quiere.
Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo,
no creer en Dios y hacer tu destino,
tener miedo a la vida y a sus compromisos,
no vivir cada DÍA como si fuera un último suspiro.
Queda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte,
olvidar sus ojos, su risa, todo,
porque sus caminos han dejado de abrazarse,
olvidar su pasado y pagarlo con su presente.
Queda prohibido no intentar comprender a las personas,
pensar que sus vidas valen mas que la tuya,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha.
Queda prohibido no crear tu historia,
dejar de dar las gracias a Dios por tu vida,
no tener un momento para la gente que te necesita,
no comprender que lo que la vida te da, también te lo quita.
Queda prohibido no buscar tu felicidad,
no vivir tu vida con una actitud positiva,
no pensar en que podemos ser mejores,
no sentir que sin ti este mundo no seria igual.
Maulló
La Chica Gato
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6:43
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Héroe
Maulló
La Chica Gato
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4:49
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viernes, abril 21, 2006
Quizá...
Maulló
La Chica Gato
a las
8:14
2
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martes, abril 11, 2006
Ser peregrino - Joyce Cary
Maulló
La Chica Gato
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8:17
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domingo, abril 09, 2006
Soledad
Maulló
La Chica Gato
a las
10:16
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lunes, marzo 27, 2006
La habitación
Aquella puerta despertaba en mí sentimientos contradictorios, pero de igual magnitud: por un lado, tenía la imperiosa necesidad de abrirla y ver el interior de la habitación; por otro, un impulso desconocido me exhortaba a salir de allí corriendo, a sacar la llave que ya había introducido en la cerradura y tirarla para no poder volver jamás.
Era una habitación extraña, con vida propia como ya había tenido ocasión de comprobar en visitas anteriores, y siempre me había parecido un lugar “especial”. Las paredes, de color rojo sangre, parecían contraerse y dilatarse rítmicamente, siempre al compás de mi respiración. Era un sitio sobrecogedor, o al menos ese era el recuerdo de mi última visita, cuando ella me había plantado definitivamente.
Había intentado entonces entrar, pero la puerta, al abrirse, no me mostró el consuelo que necesitaba, sino tan sólo dolor: mi corazón lloraba y ríos de agua caían desde el techo por las paredes, destiñéndolas y dando la macabra impresión de que torrentes de sangre inundaban la entonces angosta habitación.
Las ventanas estaban cerradas y el lugar olía a humedad. En la pared opuesta a mí, un espejo enorme me había devuelto mi propia imagen deformada, aumentando mi cabeza de forma grotesca y mostrándome la cara de una bestia, de un ser amenazador y de mirada penetrante que parecía querer salir del espejo y correr hacia mí. Tragué saliva, paralizado por el miedo y sin poder apartar los ojos de aquella escena. Deseé que aquel monstruo lograra escapar y devorarme. Caí de rodillas sobre el primer escalón y perdí el conocimiento hasta que alguien me recogió.
Aquello había ocurrido varios meses antes, y desde entonces no había vuelto a verla, pero la llave de la habitación, que había permanecido en mi bolsillo todo el tiempo, parecía haber cobrado vida propia y podía cambiar de forma y peso a capricho, haciéndose en ocasiones imposible de llevar. Asimismo, a veces, al tocarla, la había notado moverse en mi mano como si palpitara, igual que la propia habitación. Y esta era una de esas ocasiones: con el pasado a mi espalda, me sentía con fuerza suficiente para volver a aquel lugar que, a fin de cuentas, era parte de mí.
Por fin logré abrir la puerta. No quise mirar al espejo inmediatamente; preferí observar antes el resto de la habitación. Las paredes, que la última vez me habían parecido opresoras, parecían haberse aclarado ligeramente, o quizá fuera sólo un truco, un engaño producido por la luz que ahora entraba a raudales por una ventana abierta. El lugar estaba seco, y las sillas y sofás que la última vez alguien había retirado estaban colocados de nuevo en su sitio.
Bajé los dos escalones y entré respirando el aire puro. Ya en el centro de la habitación di una vuelta completa para tener una perspectiva de la misma. Y allí, en un rincón, seguía ella. La mujer a la que más había amado en toda mi vida permanecía acurrucada en una de las esquinas de la habitación como una niña, tratando de pasar inadvertida.
—¿Por qué sigues aquí?
—Eso deberías saberlo tú —me contestó con su dulce voz.
—He vuelto… —y entonces lo comprendí— para que te vayas. Tienes la puerta abierta, sal ahora.
Sonrió.
—Sabía que lo comprenderías —dijo, levantándose y mostrando su cuerpo desnudo, el mismo que yo había deseado tantas veces con anterioridad.— ¿Sabes? Me preguntaba cuánto tardarías en volver. Al fin y al cabo, nunca tuvimos un beso de despedida…
—Así que se trataba de eso…
Se acercó a mí, moviendo provocativamente las caderas a medida que caminaba con los brazos extendidos.
Me gustaría poder decir que le negué aquel beso, pero no fui lo suficientemente fuerte. Después de todo, si ella seguía allí era porque no la había olvidado.
Rodeó mi cuello y apretó su cuerpo contra el mío, haciendo que notara su forma de mujer. Colocó mis manos en torno a su cintura y se acercó aún más a mi cara con la boca entreabierta, metiendo finalmente su lengua húmeda y cálida entre mis labios. Como tantas otras veces similares, me pareció estar en el cielo y respondí a sus insinuaciones con toda la fuerza que tenía acumulada.
Tenerla allí, de nuevo, entre mis brazos, me hizo volver a la realidad. Suavemente, la aparté. Estaba llorando.
—No me eches, por favor.
Y entonces comprendí que no era más que una farsa, una forma de mantenerme encadenado a ella.
—Esta vez lo haré. Tienes que irte, tu tiempo aquí se ha agotado.
No opuso resistencia. Se fue con la cabeza gacha, y entonces la habitación pareció llenarse aún más de luz.
Finalmente, me giré hacia el espejo y caminé en su dirección. Ahora sí me devolvió mi imagen y, por primera vez en mucho tiempo, estaba sonriendo.
Salí feliz de aquel lugar y esta vez no cerré la puerta; no quería seguir ocultando mis sentimientos al mundo, sino dejarlos allí, a la vista de todos, de modo que cualquiera pudiera verlos, visitar mi corazón y ver mi alma liberada por medio de aquel espejo.
26/III/2006
Maulló
La Chica Gato
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2:41
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martes, febrero 28, 2006
Unión
Maulló
La Chica Gato
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6:00
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Inauguración
Maulló
La Chica Gato
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